El sector manufacturero de la zona euro sufrió otro contratiempo al comienzo del tercer trimestre, ya que una reducción más pronunciada de los nuevos pedidos provocó contracciones más fuertes de la producción y del empleo. Se produjeron nuevos declives en la actividad de compra y los inventarios, mientras que la confianza empresarial se debilitó hasta su nivel más bajo en cuatro meses. Cabe destacar que, tras un entorno inflacionista benigno en general en el segundo trimestre, los datos de las encuestas de julio indicaron una marcada aceleración en las presiones de los costes, ya que los precios de los
insumos aumentaron al ritmo más rápido en un año y medio. No obstante, las fábricas de la zona euro se abstuvieron de repercutir el incremento de los costes a los clientes, ya que sus tarifas cobradas se mantuvieron prácticamente sin cambios.
El índice HCOB PMI del Sector Manufacturero de la Zona Euro, una medida mensual de la salud en general del sector manufacturero de la zona euro compilada por la firma S&P Global, fue igual que el observado en junio, al registrar una vez más 45.8 en julio. En consecuencia, esta lectura representó un nuevo deterioro marcado en la salud de la economía del sector manufacturero de la zona euro.
