En medio del aumento de las cifras de contagios relacionados con la aparición de la variante ómicron, el sector servicios de España registró una notable caída de la actividad y de los nuevos pedidos en el primer mes de 2022. No obstante, y tal vez reflejando la esperanza de que estas caídas sean temporales, el crecimiento del empleo se mantuvo y el optimismo en el futuro sigue siendo positivo.
Con respecto a los precios, los costes operativos continuaron aumentando considerablemente, mientras que las tarifas cobradas subieron a un ritmo históricamente marcado.