Ingeniero químico con sólidas habilidades en administración de empresas y gestión de personas y proyectos, Antonio Desmay es director de compras de Cemex para la región de EMEA (Europa, Oriente Medio y África). La multinacional mexicana de materiales de construcción y soluciones constructivas está plenamente comprometida con la sostenibilidad y tiene como objetivo prioritario en esta materia alcanzar la neutralidad en carbono en 2050. Por ello incorpora prácticas sostenibles en todas las áreas y divisiones de la compañía en sus operaciones diarias, así como en los procesos de toma de decisiones a nivel global.
En primer lugar, ¿cómo un ingeniero químico entra en contacto con el ámbito de la contratación y las Compras y decide orientar su carrera hacia él?
Mis inicios en Cemex fueron en el área de Control de Calidad y Producción en Aragón, algo más relacionado con mi formación, pero después de varios años en ese departamento, me surgió la oportunidad de trasladarme al área de compras. El responsable, por aquel entonces, se retiró y yo pasé a dirigir las compras en la región aragonesa. Más tarde me trasladé a Madrid, México, Filipinas, siempre en los departamentos de Compras, y finalmente en 2019 volví a España.
Tu vinculación con Cemex viene de lejos, ¿qué ventajas consideras que ha aportado a la compañía la implementación de políticas ESG a lo largo de los años? ¿Y al departamento de Compras?
Creo que estas nuevas políticas no solo mejoran la reputación e imagen de Cemex para clientes, inversores y la sociedad en general, sino que refuerzan la sostenibilidad de la compañía a través de su compromiso social, ambiental y de buen gobierno.
Desde el punto de vista humano, han favorecido la atracción y retención de talento, especialmente con las nuevas generaciones, que valoran mucho la responsabilidad social corporativa.
Por otro lado, la adopción de prácticas sostenibles y eficientes desde el punto de vista de los recursos está ayudando a reducir costes operativos y facilita los mecanismos para buscar eficiencias, tanto en la operación de nuestras plantas como en la cadena de suministro. También han ayudado a impulsar la innovación, empujando a una búsqueda de soluciones sostenibles y respetuosas con el medio ambiente.
Desde la óptica financiera, representan un mejor acceso a capital y financiamiento ya que, cada vez más, estos actores están incorporando criterios ESG en sus decisiones de inversión. También una mejor visión a largo plazo ya que te obliga a desarrollar un roadmap de las acciones para mejorar los indicadores asociados a ESG, que en nuestro caso son públicos.
Desde el punto de vista de compras, considero que el factor más importante es minimizar riesgos en la cadena de suministro, especialmente desde el punto de vista reputacional, y empujar a los proveedores a que desarrollen productos y prácticas más sostenibles, además de contar con fuentes de financiamiento más baratas. Esto permite alinear a compras con la estrategia de sostenibilidad de la compañía.
Cemex se ha propuesto llegar a 2050 como una empresa neutra en carbono. ¿Cómo afronta la organización dicho compromiso y cómo está contribuyendo el área de Compras a su consecución?
Cemex ha desarrollado una ambiciosa estrategia para avanzar hacia la descarbonización de la compañía y hacer frente al cambio climático, que hemos llamado “Futuro en Acción”, y que tiene como meta alcanzar la neutralidad en carbono en 2050. Para alcanzar ese objetivo se trabaja en 6 pilares que abarcan la totalidad de áreas del negocio: los productos y soluciones constructivas, descarbonización de nuestras operaciones, la economía circular, el agua y la biodiversidad, la innovación y las alianzas y la promoción de una economía verde.
El objetivo último solo se puede alcanzar de forma trasversal, involucrando a toda la compañía, a todas las áreas de negocio, desde los proveedores, hasta los consumidores de nuestros productos e incluso al reciclado de los materiales al final de su vida útil. Nadie ni nada que tenga relación directa o indirectamente con la compañía queda exento de contribuir a la consecución del roadmap de descarbonización de Cemex.
Nosotros como área de compras tenemos un papel muy relevante en este objetivo. Entre otros muchos temas, hemos invertido en herramientas que nos permiten ser más eficientes, hemos cambiado nuestros procesos para ser más sostenibles, colaboramos con toda nuestra cadena de suministro para integrarles en nuestra estrategia y les damos las herramientas necesarias para ello. Por otro lado, la huella de los productos y servicios que compramos es, desde hace tiempo, un indicador clave en la toma de decisiones. En realidad, estamos cambiando nuestra forma de trabajar, de pensar y de decidir y la digitalización está siendo clave en ello.
Una de las prioridades en la hoja de ruta de Cemex para convertirse en una empresa con cero emisiones, es la de desarrollar soluciones sostenibles como su nueva marca Vertua. ¿Cómo aborda el departamento de Compras la búsqueda de materias primas más sostenibles y de qué factores depende que lo sean?
La fabricación de productos y soluciones cada vez más sostenibles nos ha obligado a hacer un mapeo mundial de productos con bajas emisiones de carbono y de fuentes potenciales de los mismos. Compras está siendo clave para garantizar la disponibilidad actual y futura de estos materiales. Hemos reforzado los equipos encargados de esta función y hemos creado un equipo de trabajo multidepartamental para coordinar este esfuerzo.
También tenemos equipos focalizados en compra de energía limpia, que nos ha permitido tener ya el 30% de la energía que consumen nuestras fábricas, certificada.
Desde hace unos años Cemex opera bajo el lema “One Cemex”. ¿Cómo se gestionan las Compras y la búsqueda de proveedores cuando nos referimos a mercados regionales?
Trabajar como “One Cemex” implica reforzar la coordinación entre los departamentos y derribar los silos que algunas veces se forman entre ellos. Hay que hacer un exhaustivo escaneo de las fuentes disponibles, que cumplan con la calidad, la regulación y otros aspectos técnicos y económicos. Esto significa que debe haber una estrecha colaboración entre las operaciones, los departamentos de calidad y compras, además de incluir en el trabajo al departamento jurídico, planificación, etc. Trabajar como un solo Cemex tiene la ventaja de tener equipos en todos los mercados del mundo que comparten conocimiento, experiencia y mejores prácticas.