DIGITALIZACIÓN SOSTENIBLE EN LA FUNCIÓN DE COMPRAS: EFICIENCIA Y COMPROMISO ESG
Para las grandes empresas, la digitalización sostenible es una realidad consolidada. Sin embargo, para medianas y pequeñas empresas, su implementación es todo un reto, ya sea por falta de recursos o por desconocimiento de las soluciones disponibles para afrontarla. Pero lo que es un hecho es que adoptar tecnologías digitales no solo mejora la eficiencia operativa, sino que también puede hacer que las Compras sean más responsables y estén por tanto alineadas con criterios ESG (ambientales, sociales y de gobernanza). Desde el uso de plataformas colaborativas para compartir recursos y reducir el desperdicio, hasta la aplicación de inteligencia artificial para optimizar rutas logísticas y minimizar emisiones, el futuro apunta hacia una mayor automatización, integración de tecnologías emergentes y una regulación más estricta en materia ESG. Si bien, como veremos, en el compromiso con la sostenibilidad no basta con apostar por la digitalización sino también, por una gestión adecuada de la misma.
Automatización y reducción del uso de papel
Las plataformas digitales han permitido la eliminación de procesos manuales basados en papel, reduciendo el consumo de recursos naturales y optimizando el tiempo de gestión.
Herramientas como la firma electrónica, la facturación digital y los sistemas de aprobación automatizados minimizan la burocracia y contribuyen a operaciones más sostenibles.
Transparencia y trazabilidad en la cadena de suministro
El uso de tecnologías como blockchain, Big Data e Inteligencia Artificial permiten a las empresas obtener una visión clara del impacto ambiental de su cadena de suministro. Estas herramientas ayudan a monitorear en tiempo real el origen de los productos, las condiciones de producción y la huella de carbono, facilitando una toma de decisiones alineadas con criterios ESG de manera ágil e informada.
Optimización del gasto y reducción de desperdicios
Los sistemas de gestión digitalizados permiten un mejor análisis de datos para optimizar el gasto y reducir compras innecesarias. Mediante el uso de Inteligencia Artificial y machine learning, las empresas pueden predecir necesidades futuras, evitando el exceso de inventario y el desperdicio de materiales.
Evaluación de proveedores con criterios ESG
Las plataformas digitales especializadas en homologación y evaluación de proveedores facilitan la selección de socios comerciales que cumplen con los estándares de sostenibilidad. Estas herramientas permiten analizar indicadores clave, como emisiones de CO2, condiciones laborales y certificaciones medioambientales, garantizando que las Compras sean responsables y contribuyan al cumplimiento de los compromisos de la empresa.
El gran reto de digitalización: la reducción de la basura digital
Uno de los mayores desafíos de la digitalización sostenible es la gestión de la conocida como basura digital, como son el almacenamiento masivo de datos innecesarios, los correos electrónicos acumulados o los archivos duplicados que contribuyen al aumento del consumo energético en centros de datos, que requieren grandes cantidades de electricidad para su mantenimiento. La adopción de estrategias como la depuración periódica de archivos, la optimización del uso de servidores y la implementación de políticas de almacenamiento responsable pueden ayudar a mitigar este impacto.
¿Qué es la basura digital?
La basura digital se refiere a todos aquellos archivos, documentos, correos electrónicos y datos almacenados que ya no tienen utilidad pero siguen ocupando espacio en dispositivos y servidores. Un almacenamiento innecesario que no solo reduce la eficiencia operativa, sino que también contribuye al consumo excesivo de energía. Según diversos estudios, los centros de datos consumen aproximadamente el 1% de la electricidad mundial, y una parte significativa de este consumo proviene de datos obsoletos o innecesarios.
¿Cómo pueden las empresas reducir la basura digital?
Las empresas pueden implementar varias estrategias:
- Políticas de limpieza de datos: establecer protocolos internos para eliminar periódicamente documentos y archivos innecesarios.
- Optimización del almacenamiento en la nube: a través de soluciones en la nube con gestión eficiente de recursos y eliminación automática de datos obsoletos.
- Concienciación del personal: capacitar a los empleados sobre la importancia de mantener sus archivos organizados y eliminar información redundante e innecesaria.
- Uso de herramientas de gestión de datos: implementar software que identifique y elimine archivos duplicados o innecesarios en los servidores corporativos.
- Reciclaje de equipos obsoletos: en lugar de desechar dispositivos electrónicos en desuso, las empresas pueden participar en iniciativas de reacondicionamiento y donación a poblaciones vulnerables. Un ejemplo de ello es la iniciativa puesta en marcha por CEOE, que busca dar una segunda vida a equipos informáticos obsoletos para su reutilización en entornos educativos y sociales, reduciendo así la brecha digital.
Por todo ello, la transición hacia un modelo digital y sostenible es, sin duda, el camino a seguir en la evolución de la gestión de Compras.