La economía manufacturera de España continuó expandiéndose en marzo. La producción aumentó a su ritmo más fuerte en un año, mientras que los nuevos pedidos aumentaron por segundo mes consecutivo en medio de señales de una demanda externa más firme. En consecuencia, las empresas respondieron reforzando sus volúmenes de compra y la dotación de personal. La confianza en el futuro siguió siendo positiva a pesar de haber disminuido ligeramente frente al mes anterior.
En cuanto a los precios, los costes de los insumos aumentaron por segundo mes consecutivo, aunque sólo modestamente. Los precios de venta continuaron disminuyendo en medio de un entorno empresarial competitivo y una demanda del mercado todavía decepcionante.