EL ESG BONUS MALUS Y SU CONTRIBUCIÓN A LA CONSTRUCCIÓN DE UN FUTURO SOSTENIBLE
Marianna Polini, Regional Category Buyer en BASF, nos habla de los antecedentes y los beneficios que la implementación del proyecto ESG Bonus Malus ha aportado a la compañía. Una iniciativa con la que BASF quedó finalista en la última edición de los Premios AERCE.
Como gran empresa que es, el Grupo BASF tiene como objetivo principal liderar el camino hacia un futuro sostenible para nuestros proveedores. Nuestra estrategia contempla la reducción de nuestras propias emisiones de gases de efecto invernadero (Scope 1 y Scope 2) en un 25% a nivel mundial para el año 2030, en comparación con los niveles de 2018.
A pesar del crecimiento de nuestro negocio, en BASF nos comprometemos a lograr cero emisiones netas de CO2 para el año 2050. Estos objetivos ambiciosos son fundamentales para nosotros y estamos tomando medidas concretas para alcanzarlos. Y el Proyecto ESG Bonus Malus es una de las iniciativas que hemos implementado en este sentido.
Nuestro objetivo siempre ha sido contribuir a un cambio de mentalidad en relación con la sostenibilidad, integrando el concepto mismo en nuestros procesos de compras y fomentando un impacto positivo tanto a nivel interno como externo en relación a los temas ESG. Para lograrlo, creamos el ESG Bonus Malus basado en los resultados de las certificaciones de la plataforma Ecovadis de nuestros proveedores, que permite medir el desempeño ESG en nuestras licitaciones.
Inicialmente, la sostenibilidad se introdujo en nuestras compras directas a través de nuestro exitoso Programa de Gestión de CO2 de Proveedores (Supplier CO2 Management Program). Sin embargo, también nos propusimos integrar la sostenibilidad en nuestras compras indirectas mediante el ESG Bonus Malus de sostenibilidad.
Para lograr nuestros objetivos, lanzamos el primer proyecto piloto en el departamento de compras indirectas en España. Nos centramos en proveedores con un gasto significativo de compras indirectas (equipos, servicios y suministros), para que las evaluaciones de las certificaciones de Ecovadis fueran significativas. Por lo tanto, solicitamos a todos los proveedores con un gasto relevante que se registraran en Ecovadis.
Realizamos una campaña de comunicación constante a lo largo del tiempo para explicar la importancia de unirse a este modelo, tanto dentro como fuera de BASF en España. Utilizamos diversas estrategias, como herramientas de marketing por correo electrónico, webinarios de capacitación con proveedores donde se explicó en detalle la iniciativa, y la difusión de videos internos en BASF que mostraban la colaboración entre nuestros proveedores y nosotros, así como la importancia y el uso del ESG Bonus Malus.
La herramienta ESG Bonus Malus permite evaluar y comparar el desempeño ESG de los proveedores en una escala unificada. Los proveedores pueden recibir un bonus que varía del 0,1% al 5,5%, dependiendo de su puntuación en la evaluación. Con esta metodología, motivamos a los proveedores a mejorar continuamente sus puntajes o a realizar la evaluación si aún no lo han hecho.
Asimismo, en BASF contamos con un departamento de sostenibilidad en Compras que se encarga de todos los temas relacionados con ESG. Nos han proporcionado una herramienta de recopilación de datos que nos permite ver qué empresas se han registrado en Ecovadis y la evolución del desempeño de aquellas que ya están registradas. Esto nos permite determinar si nuestras políticas ESG aplicadas a los proveedores están teniendo efecto. En cuanto a las licitaciones en las que se aplica ESG, también contamos con una herramienta que recopila todos los resultados.
El proyecto ESG Bonus Malus ha establecido sinergias entre compradores de diferentes categorías y ubicaciones, ya que la incorporación de la sostenibilidad en el proceso de compras es un objetivo compartido. También ha generado sinergias entre el departamento de compras y varias unidades de negocio, ya que hemos mantenido una comunicación constante con ellos, siendo ellos mismos los encargados de seleccionar a los proveedores en las licitaciones donde se aplica el ESG Bonus Malus. La aprobación y colaboración han sido consistentes durante toda la implementación de la iniciativa, ya que los beneficios que aporta el ESG Bonus Malus se alinean con los valores de la empresa en materia de sostenibilidad.
Los resultados han sido extraordinarios. En nuestro mercado europeo, hemos logrado recopilar y utilizar evaluaciones de casi 700 proveedores de nuestros principales proveedores, y hemos estado aplicando los criterios de sostenibilidad en nuestras licitaciones desde entonces. Italia y Turquía también adoptaron la iniciativa en 2023, con resultados positivos. Actualmente, estamos en proceso de implementar la iniciativa en el resto de la Unión Europea con un enfoque particular en Alemania.
Además, hemos presentado la iniciativa externamente en foros como AERCE (Asociación Española de Profesionales de Compras en España), SPP (Sustainability Procurement Pledge) y la Comisión Europea. También estamos planeando presentarla a todos los miembros de la red Together for Sustainability durante el 2025.
Después de nuestra participación en el último Congreso de Compras AERCE en España, estamos recibiendo contactos de empresas interesadas en obtener más información sobre la metodología de aplicación del ESG Bonus Malus. Nos enorgullece poder contribuir al fomento de la sostenibilidad en otras empresas y aportar nuestro granito de arena en este importante tema.
Por último, quiero recordar que, como mencionó nuestro director general, Carles Navarro, el futuro será sostenible o no será. Y para que sea sostenible, el concurso de la química es imprescindible ya que está presente en prácticamente todos los procesos de manufactura actuales. Si queremos evolucionar hacia un sistema productivo descarbonizado y circular es imperativo hacer un buen uso de la química.